¿Por qué tenemos que cuidar el suelo?

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16 de noviembre de 2022
Chile

Eliminar el uso de estos productos químicos, incorporar manejos culturales, uso de bioinsumos y control biológico de plagas, ha demostrado contribuir a un suelo más sano.

Proveer alimentación para toda la humanidad es sin duda uno de los grandes desafíos que el mundo tiene por delante en lo inmediato. Pero junto con eso, también está el hecho de cultivar la tierra de manera sostenible y no seguir erosionando los suelos. Acá te explicamos por qué.

Desde nuestra propuesta como Banca Ética Latinoamericana, sabemos que lo primero que tenemos que enfrentar como humanidad es el desafío de la seguridad alimentaria. Esto, aunque parezca una obviedad, se debe a que estamos frente a la disyuntiva de una población creciente, pero con recursos finitos y cada vez más escasos.

Entonces, en algún momento nos vamos a enfrentar a ese problema, cómo alimentamos a las personas, nos explican nuestros expertos del área de Medio Ambiente.

El suelo como factor determinante

Y todo esto que hemos enunciado al abrir este texto tiene mucho que ver con el cómo producimos los alimentos. Una explicación al respecto.

La agricultura tradicional intensiva, una de las principales formas de producir alimentos en el mundo, genera importantes efectos perjudiciales al medio ambiente. Esto influye en la seguridad alimentaria futura. ¿Por qué? Porque su objetivo es obtener el mayor rendimiento del suelo agrícola con el fin de maximizar la producción de alimentos.

Y esto se logra con prácticas como el uso de fertilizantes, cuyo exceso puede infiltrarse en aguas subterráneas o ser arrastrado a cursos de agua, generando sobrecarga de nutrientes en aguas superficiales como lagos, lo que conlleva a la proliferación de algas que suprimen el desarrollo de otras plantas y animales acuáticos. El uso de herbicidas y pesticidas también generan contaminación en los cursos de agua dulce, lo cual afecta tanto a la salud humana como a la vida silvestre.

Estos productos químicos también afectan la biodiversidad, dado que eliminan agentes polinizadores, así como plantas e insectos que sirven de alimento para otras especies.

La aplicación de pesticidas y fertilizantes químicos también dañan a microorganismos e insectos que tienen un papel fundamental en la absorción de nutrientes y que además contribuyen a la generación de materia orgánica.

La agroecología como solución

Entonces, se debe entender al suelo como un organismo vivo, el cual alberga insectos, bacterias, hongos y levaduras, que mantienen un equilibrio entre la materia orgánica y los minerales, mejorando la absorción de nutrientes en las raíces de las plantas.

Eliminar el uso de estos productos químicos, incorporar manejos culturales, uso de bioinsumos y control biológico de plagas, ha demostrado contribuir a un suelo más sano, con una mejor estructura, infiltración y retención de agua, previniendo la erosión, todos estos factores importantes ante el escenario de sequía que hemos tenido en el país.

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